SCHIEBL’S KAFFEEHAFERL
Es una de las carpas más pequeñas con sus 100 asientos, conviertiéndola en el lugar ideal para las familias.
Imprescindible probar el café irlandés, aunque también las frituras de manzana, el strudel, y las variadas tortas y pasteles, además de los varios licores y vinos preciados.
En esta carpa no hay cerveza y como no hay música es un verdadero oasis de paz.